Clara trata de coger las
zapatillas que su hermano se empeña en mantener en el centro de la piscina.
Clara imitando la voz quebrada del llanto llama a su madre que a su vez habla
por el móvil y no la escucha.
Otra niña más pequeña juega a ser
un lobo y le aulla. Clara sale en su
persecución riendo.
Eso es lo que les dura el disgusto a los niños jajajaja, bendita infancia.
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